1 enero 2025
Poner en marcha nuestros talentos
Eres consciente de tus talentos pero ¿tienes resistencias a ponerlos al servicio de los demás?
«El talento es algo bastante corriente. No escasea la inteligencia, sino la constancia»
Doris Lessing
Ya sabes lo que te gusta y lo que se te da mejor. Has leído libros, asistido a cursos y talleres magníficos. Y no consigues poner en marcha tus nuevos proyectos para desarrollar tus pasiones y talentos aplicando lo aprendido. ¿Te genera esto una sensación frecuente de frustración?
Las inercias adquiridas son difíciles de vencer y además surge el fantasma del miedo. ¿Y si no lo hago sufrientemente bien? Tanto esfuerzo será inútil.
Comienzas con ciertas rutinas para mejorar algún aspecto y al poco las abandonas. Quizás necesites cambiar la forma de plantearlo.
Un nuevo proyecto para tu talento
Desarrollar tu talento se puede convertir en un proyecto. No te pagan de momento. A cambio tienes la libertad y el entusiasmo de saber que lo haces porque quieres, te gusta y más adelante podrás ponerlo al servicio de los demás.
Usaremos como ejemplo el talento para escribir cuentos.
Necesitarás:
- Concretar el proyecto. Será una planificación de objetivos interrelacionados.
- El proyecto en nuestro ejemplo puede ser escribir una colección de diez cuentos sobre un tema conductor que los enlace.
- Establecer objetivos. Determina los fines a alcanzar.
- Intenta que cada objetivo sea lo más concreto, específico. Además, procura ser realista. Para ello puedes plantear objetivos más pequeños. Debes poder comprobar de manera fácil el progreso en unos tiempos que vayas marcando.
- En el ejemplo como primer objetivo recopilarías información sobre la escritura en general y en particular de cuentos. Podrías buscar talleres para aprender.
Otro objetivo sería extraer todo lo reunido tu propia guía, referencia de escritura personal. - Después, o en paralelo, decidirías el hilo conductor.
- Y terminados éstos el siguiente objetivo podría ser escribir un primer cuento de cinco páginas, incluso de menos, para soltarte.
- Crear tareas. El trabajo que debe hacerse en tiempo limitado.
- Las tareas las priorizas (de acuerdo con tus objetivos) y planificas en el tiempo para y ejecutarlas cuando lo hayas planificado.
- Si una tarea concreta no la puedes concluir en la fecha marcada por circunstancias varias, planifícala en otro momento y en algunos casos cambiando la planificación de otras actividades para que todas ellas encajen en la agenda.
- Y recuerda «divide y vencerás» para crear tareas más pequeñas y realistas.
- En el objetivo de escribir un cuento de cinco páginas una primera tarea sería concretar la idea principal del cuento acorde con el tema conductor. A continuación, otra tarea permitiría buscar bibliografía o referencias sobre la idea. Luego podríamos escribir las cinco primeras líneas, o pensar el final. Y siempre marcando unos tiempos realistas.
- Seguir hábitos para algunas de las tareas.
- Por ejemplo, para las tareas de escritura podemos fijar como hábito escribir siempre a la misma hora y prepararnos una infusión antes de sentarnos.
- Revisar como vas y evaluar periódicamente el avance
- Mide la realización de tus objetivos. Detecta y corrige cualquier desviación que te aparte de su consecución. Puedes añadir, eliminar o cambiar tareas.
Afianzando el compromiso
Como decía Abraham Lincoln «El compromiso es lo que transforma una promesa en realidad.»
Para comprometerte con tu proyecto es esencial motivarse. Quizás haya que modificar alguna circunstancia. En nuestro ejemplo puede ser que tengas que marcharte a una biblioteca con más tranquilidad al escribir.
Además, habrá que mantener la motivación teniendo retroalimentación del rendimiento, positivo y negativo. Mira hacia atrás para ver lo conseguido (vaso medio lleno) y hacia adelante para ver lo que queda (vaso medio vacío)
Es importante aprender a manejar varios objetivos, poner prioridades y encontrar el equilibrio adecuado.
Por último, te puedes aprovechar del apoyo social:
- ¿Puedes usar el hecho de ser observado para que te ayude en tu camino?
- ¿Puedes aconsejar a los demás sobre tus propios contratiempos? ¿Puedes aprender de los éxitos y fracasos de los otros?
Herramientas que te ayudarán
Al ir trabajando en tu talento piensa qué recursos de apoyo necesitarás. Tal vez precises la colaboración de algunas personas. O te falten materiales y tecnologías. Dependerá de tu talento y proyecto concreto.
De manera general te pueden ayudar ciertas herramientas para:
- Tomar notas. Es fundamental que recopiles lo que vas aprendiendo. Luego podrás sintetizarlo y emplearlo. Se puede tratar de un bloc de papel o de aplicaciones que se integra en el móvil y en el ordenador.
- Agrupar recursos en línea. Te permitirán ir marcando páginas en la web para leerlas en momentos posteriores. Son como los marcadores de los navegadores, pero con más funcionalidad: etiquetado, estado (leído, no leído), y notas
- Almacenar imágenes, documentos, música o vídeos. Podrás usarlos más adelante como fuentes de inspiración.
- Planificar y revisar avances. Tendremos que gestionar a la vez tres niveles de planificación:
- A largo plazo a través del listado de objetivos que hemos elaborado con unas fechas aproximadas de realización.
- A medio plazo con un cuadrante de planificación semanal.
- Diaria en una agenda.
En cualquier caso, hay disponibles soluciones digitales, muchas gratuitas y que se integran en el móvil y el ordenador, y opciones basadas en papel o en otros medios no digitales
Lo importante es que te sirvan para que tu talento vaya evolucionando. Con la ilusión que supone y la satisfacción de que podrás ponerlo al servicio de los demás.
Si estas palabras te resuenan y necesitas apoyo, te animo a que contactes conmigo. Analizaremos juntos cuál es tu situación y te acompañaré para descubrir tus próximos pasos.